En Florencia, cerca de Gli Uffizi, Galileo y sus discípulos realizaron experiencias con agua del Arno. En 2003, recogí agua en el mismo sitio: comenzaba una hidroteca, un proyecto de recolección, catalogación, guarda, conservación y exposición de las aguas vírgenes en la naturaleza, las aguas urbanas y sus bitácoras de viaje.
Meter las manos en el Arno fue parte del proceso luego de tener contacto con una1ª edición del libro de Galileo de 1612 “Discorso intorno alle cose che stanno in súl´acqua, o che in quella si muovono””.En Holanda conocí el Ministerio del Agua y en Venecia a un artista que crea, camina, duerme sobre el agua que es- además- su horizonte. Es difícil imaginarlo en una ciudad con escasez de agua potable. Elaboré la obra “Jardín primitivo” en momentos de crisis hídrica y su premio fue un viaje a El Calafate, y en dos etapas a los nueve ríos que serían “Poética de los ríos patagónicos y del glaciar Perito Moreno” de 2009 a 2010.
En 24 vasos junté agua de red que evaporó durante un mes. El conjunto es un paisaje extraño en un registro fotográfico. Desde el agua cristalina hasta el sedimento forman “Poética doméstica”. Es la primera de las aguas urbanas antes de viajar a París en 2011 y comenzar “Poética de las fuentes parisinas y del río Sena”. Esta poética parte y termina en el Museo Pompidou. Comienzo en la fuente de Niki de Saint Phalle y Jean Tinguely luego de realizar el reservorio del Sena y de 20 fuentes, la n° 21 es la del restó George, último piso del Centro Pompidou cerrando azarosamente el recorrido.
En “Algo Fluye” se exponen las aguas en ampolletas de cristal soplado, en correspondencia con la cartografía de las acciones y su registro fotográfico, los vasos con el sedimento del agua bahiense y sus imágenes, y los elementos utilizados para la recolección. Humberto Eco dice aludiendo a la lista poética que Whitman va acumulando lugares partiendo de la isla donde nació y Joyce nombra en su obra, para representar el sentido del fluir del Liffey, centenares de ríos de todos los países. De esa lista infinita de ciudades con sus fuentes y sus ríos, elijo continuar la hidroteca en Roma, donde la cultura popular del agua es herencia del sueño fundacional y democrático de Trajano.